La mayor aerolínea low cost atraviesa zonas de turbulencia que parece que no van a terminar. Esta semana, la compañía recibió un aluvión de críticas de sus clientes por su política al asignar asientos. Familias que vuelan separadas, menores que deben abordar solos los aviones , silencios ante el modo de actuar ante posibles emergencias y una nueva “avivada” que sólo busca recaudar más para seguir promocionando precios bajos que terminan por salir muy caros.
Si bien la aerolínea irlandesa insiste en que no ha cambiado su mecanismo de venta de boletos, los clientes han notado que la situación no es la misma que hace un mes atrás y denunciaron en las redes que la compañía ahora selecciona aleatoriamente los lugares de los pasajeros aunque se trate de una misma reserva. De esta manera, persuade a los usuarios a pagar un costo extra si es que desean estar cerca de sus familiares, amigos o compañeros de viaje. Elegir donde sentarse va desde los dos euros por las peores plazas hasta más de diez por los asientos de las primeras filas, dependiendo del vuelo.
Esta medida ya ha recibido innumerables quejas de grupos que fueron acomodados en diferentes puntas de la aeronave aun cuando estaba parcialmente llena y había muchos asientos contiguos libres. La pasajera Pauline Burns explicó que en su vuelo a Alicante ubicaron a su hija de 3 años sola a dos filas de distancia de ella y a 10 de su marido y padre de la pequeña. “Tuvimos que pagar para que nos den asientos juntos que claramente había y que no nos asignaron en el check in”. Otra damnificada, Cathy Dwyer, explicó que obligaron a su hija de 5 años a abordar por la parte trasera del avión y a ella y a su hijo de 7 por la parte delantera pero igualmente separados.
Las historias se multiplican, los reclamos van en aumento y una de las cuestiones que más inquieta a los clientes es el accionar ante una posible emergencia. Al respecto, la compañía minimizó las consideraciones planteadas por algunos pasajeros que expresaron su preocupación por lo que podría ocurrir si las familias en pánico se separaran y expresó que la seguridad no se veía afectada.
A pesar de la negación de la compañía, un cambio sí es evidente; en el sistema de reservas de la web aparece una ventana emergente que alerta de las complicaciones que supone sacar la tarjeta de embarque sin abonar la reserva de un asiento. Si se decide avanzar en el proceso de compra salteando este paso, el portal realiza tres advertencias de manera alarmante:
1.- Puede que le asignemos un asiento en medio del avión
2.- Le asignaremos un asiento aleatoriamente
3.- Puede que no se pueda sentar junto a su compañero de viaje
Una manera de sembrar el desconcierto para cosechar más y más dinero.

Comentarios

  1. Es cierto, son una compañía de última, nos cobraron 35 euros para darnos los pases de a bordo porque las máquinas no funcionaban, el vuelo sAlió casi una hora demorado, la gente sentada en el suelo porque no había espacio para esperar el avión. UN DESASTRE, NUNCA MASSSSSSSSS

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