Entrevista a Genaro Trucco, Sec Gral del Gremio. Tras eliminar las tarifas mínimas para vuelos de cabotaje a partir del 15 de agosto, se encendieron luces de alerta en la industria y una profunda preocupación en el colectivo laboral del sector. Genaro Trucco dio claras definiciones.

¿Cómo calificas o como consideras la decisión tomada por el Ministerio de Transporte?

Desde la Unión de Aviadores de Líneas Aéreas (UALA) venimos denunciando desde un primer momento las nocivas políticas aerocomerciales impulsadas por el Gobierno Nacional que lejos de transformar positivamente al sector, tornan al sistema en un esquema endeble, de concentración de mercado, competencia desleal, extranjerización y carente de cualquier garantía para los Trabajadores Aeronáuticos.

La decisión del Ministerio de Transporte de eliminar el piso sobre la banda tarifaria en vuelos de cabotaje es otra lamentable desicion del Gobierno tendiente a beneficiar a las empresas e intereses privados. Debemos recordar que fueron los funcionarios de Norwegian quienes hicieron pública esta demanda al Gobierno  como condición para desembarcar en Argentina, pero solo si se garantizaban la máxima rentabilidad.

Mientras el Gobierno intenta “vender” lo positivo de la medida, la realidad es que esta iniciativa en combinación con la dramática devaluación de nuestra moneda local, habilita a las megacorporaciones extranjeras que tengan incidencia en el mercado, a ejecutar una política de dumping y competencia de tarifas agresiva y desleal que al corto o mediano término solo generara una concentración de mercado en claro desmedro de las empresas Nacionales y Estatales.

¿Cuáles son los efectos de esta medida?

Está comprobado que la política de liberalización de bandas tarifarias, genera precios bajos en el inicio del ciclo, pero luego finaliza drásticamente cuando alguno de los operadores intervinientes adquiere el domino del mercado, luego de eliminar a la competencia, y obviamente el vencedor vuelve a fijar el valor de referencia para esa ruta, pero ahora desde una posición monopólica con los condicionamientos que ello implica.

Es aquí donde el Estado debería intervenir, ecualizar y proteger a la industria nacional de las corporaciones extranjeras, pero vemos que por el contrario, se liberaliza el sector dejándolo una vez más a merced del mercado y de los intereses extranjeros.

Este tipo de medidas generan un daño directo adicional a los intereses de las empresas del estado, ya que plantea un esquema de tarifas y competencia desleal que atenta especialmente en contra del Grupo estatal AU/AR, en virtud de que el mismo es sabido desarrolla un rol federal y de conectividad al servicio público sobre todo el país y la región, inclusive en aquellos destinos poco o nada rentables.

¿Desde la perspectiva de UALA esta medida es aislada u obedece a una plitica determinada?

Lamentablemente esta medida no resulta casual, ya que está en clara sintonía con el rumbo neoliberal de este Gobierno, y la política aerocomercial ejecutada por el Ministro Dietrich no es ajena.

La continua reducción de los aportes del estado al Grupo AU/AR han sido sin dudas una de las movidas políticas necesarias de este Gobierno en pos de implementar su “Revolución de los Aviones”.

Con este desfinanciamiento, han logrado que el Grupo AU/AR se contraiga en su participación a raíz de la falta de inversión real dentro de un escenario que garantizaba el crecimiento de mercado, cediéndoles así el espacio abandonado por el Grupo estatal a los diferentes “nuevos operadores” que en simultáneo esta misma administración gubernamental le dio la bienvenida, e inclusive que directa e indirectamente subvencionó.

Está claro que el rol del Estado debería haber sido el de generar el contexto ideal para que las empresas u organismos estatales puedan cumplir con su misión y rol de manera eficiente, auspiciándole siempre las mejores condiciones, máxime si se trata de un Grupo Aéreo de bandera encargado de la interconexión del país, y no la realidad que hoy enfrentamos.

Días pasados se concretó la compra de Alas del Sur que fue adquirida por JetSmart. ¿Por qué fue posible?

Las escandalosas audiencias para el otorgamiento de Rutas y Permisos a operadores aéreos, fueron parte esencial para seguir avanzando en el “cambio de paradigma” que los CEO´s pseudo funcionarios anunciaron en su oportunidad, y fue esta Asociación la que denunció en aquella instancia marcando la insolvencia y falta  de capacidad operativa de la mayoría de las empresas presentadas en aquella oportunidad.

Pese a ello, el ANAC y el Ministerio de Transporte llevaron adelante una grosera y tendenciosa gestión en donde sin importar las observaciones y objeciones señaladas, avalaron y autorizaron sin restricción alguna las mismas.

Tal es el caso del “operador” Alas del Sur, empresa que recibió sus permisos pese a nunca haber demostrado capacidad operativa o financiera alguna, y en la actualidad el Gobierno le permite “especular y revender” los certificados de Operador a otros, permitiendo el potencial ingreso de capitales chilenos que tienen como único objetivo generar sus ganancias a costa de continuar nutriendo a la industria nacional con los nocivos modelos Low Cost.

Una vez más queda en evidencia que las tan anunciadas Audiencias Públicas de Rutas no eran otra cosa que una falaz puesta en escena por parte de las Autoridades gubernamentales para permitir el negocio a cualquier costo.

El ANAC tiene un rol fundamental en la implementación de este modelo aerocomercial impulsado por el gobierno, y por ello viene avanzando en un proceso de flexibilización de la Normativa Aeronáutica (RAAC) con el solo propósito de homogenizar la región sin ningún tipo de reservas, en evidente favor a los modelos de negocios de las Empresas extranjeras que exigen condiciones como ser la baja en los requisitos para obtención de licencias, libre migración de matrículas y licencias, como así también la degradación de la normativa en general en pos del abaratamiento de costos, deteriorando sin dudas la seguridad operacional. Además de este grave accionar, el ANAC que debiera ser el responsable de controlar el sistema aéreo, ha sido sometida a un fuerte recorte presupuestario tal como fue anunciado en el Boletín Oficial de la Nación, y por ello las autoridades del mismo pretenden también delegar el poder de auditoría y control a las mismas empresas que debería controlar, planteando un conflicto de intereses inadmisible.

Para terminar…se comenzó a escuchar que Flybondi estaría creando un sindicato de empresa. ¿Como ves este tema?

Otro eje necesario para la “Revolución de los Aviones” es sin dudas la  desindicalización, ya que les resulta clave para llevar adelante el objetivo de liberalizar el mercado y maximizar las ganancias de las Empresas a costa obviamente de la reducción de garantías, derechos y condiciones laborales de los Trabajadores.

Por todo esto desde la Unión de Aviadores de Líneas Aéreas (UALA) nos  declaramos en Estado de Alerta en defensa de la fuente laboral y nuestras condiciones de trabajo, por lo que llevaremos adelante todas las medias políticas y sindicales que se requieran en pos de regularizar esta situación.

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