Hace exactamente dos años publique como primicia que Flybondi levantaba su base en Córdoba. La revolución de los aviones sumaba otro fracaso en agosto 2019. Ahora Gustavo Santos hace campaña en el aeropuerto Taravella y Lufthansa desmintió a Franco Rinaldi.
Si bien la memoria no suele ser una de las virtudes humanas más ejercitadas y aplicadas a la hora de evaluar procesos que condujeron al presente que se analice, desde este medio volvemos a poner el foco en parte de la política aerocomercial que condujo al fracaso de la revolución de los aviones no solo porque el andamiaje estructural en gran parte sigue vigente sino porque muchos de los mentores y actores de aquel proceso continúan participando.
Mientras se multiplican publicaciones, opiniones descontextualizadas acompañadas de fotos con aeronaves de líneas aéreas que ya no operan hacia argentina por la pandemia, en twitter, y realizan marchas impulsadas por el ex Secretario de Turismo Gustavo Santos en Córdoba, lo que desde esos espacios se hace es desconocer lo que hicieron y negar la pandemia como factor desbastador para la industria aerocomercial y turística.
Entonces…repasando. El primer fracaso de la revolución de los aviones le pego a Andes, cuando debió devolver cuatro Boeing 737/800 por desregulación tarifaria y devaluación en 2018. El segundo fracaso dejo en tierra a Avianca Arg y el tercero obligo a Flybondi a desactivar su base operativa en Córdoba, aeropuerto en el que tenía un pseudo taller aeronáutico y desde donde volaba con una aeronave que pernoctaba en el Taravella.
Si bien esa última novedad fue revelada hace exactamente dos años, el cese de la base que Flybondi operaba en Córdoba se hizo efectivo desde el 1 de Octubre del 2019. https://aviacionenargentina.com.ar/a-flybondi-se-le-cae-la-base-de-cordoba-habria-despidos-pilotos-y-tripulantes-desprotegidos/
Desde aquel momento por razones de mercado y debacle macro-económico, muchos de los vuelos que empresas de la región operaban hacia Córdoba anunciaban que interrumpían sus servicios. Por caso vale como ejemplo el anuncio realizado por Azul Líneas Aéreas cuando en enero del 2019 anuncio que desde abril del mismo año dejaba de volar desde Porto Alegre a Córdoba y Rosario.
Gustavo Santos con quien he conversado en más de una ocasión sobre estos temas instalo en aquel momento una frase que quedo “CONECTIVIDAD O MUERTE”
Pues bien los resultados muestran que las razones y motivos que condujeron a la muerte de la revolución de los aviones, ocurrieron desde Octubre del año 2018 en adelante y que el deseo e impulso bien intencionado de Gustavo Santos para alcanzar mayor conectividad fue contrario a las políticas implementadas por sus superiores directos. Dietrich, Lopetegui y Mauricio Macri.
Pasados dos años del comienzo del fin, Santos juega su carta política en la provincia haciendo campaña en el aeropuerto de Córdoba, terminal aérea que fue una de las primeras víctimas de aquella política predatoria.
La base de Aerolíneas Argentinas en el Taravella será restablecida cuando la demanda lo permita, dado que es clave como poderoso centro de conexión para el país en lo domestico y en lo internacional para rutas que lo permitan.
Seguramente JetSmart ira por un camino similar, pero la realidad indica que durante las vacaciones de invierno 2021 en pandemia solo se voló en el doméstico según fuentes consultadas a un 35 o 40% de la capacidad operativa, comparando esos valores con los números pre-pandémicos.
Por ultimo Franco Rinaldi actual precandidato a legislador por el espacio opositor JUNTOS en lugar de reconocer al menos algo del fracaso detallado, redobla la apuesta y fiel a su estilo efectista mete un tweet infiriendo que Lufthansa dejaría de volar al país
La empresa emblema de Alemania lo desmintió instantáneamente.
La mentira y la negación de los errores cometidos conducen a la muerte y el sistema aerocomercial del país necesita revivir con verdad y nuevas reglas para alcanzar una conectividad sustentable en el tiempo.
Diego Dominelli