La Junta de Investigación de Accidentes de Aviación Civil (JIAAC) informa que durante el día de hoy continúan los trabajos en el lugar donde se hallaron los restos de la aeronave Mitsubishi MU-2 Matrícula LV-MCV, en la confluencia de los ríos Paraná Guazú y Barca Grande, tareas de investigación del accidente que son coordinadas con el Juzgado número 2 de San Isidro.
El trabajo de campo comenzó durante la mañana de ayer, cuando un equipo conformado por los investigadores de la JIAAC, agentes de Prefectura Naval Argentina, Bomberos Voluntarios de San Antonio de Areco y la sección de canes de Gendarmería Nacional Argentina, se abocaron a la identificación y recolección de los restos de la aeronave.
Los procedimientos que se están llevando adelante priorizan el trabajo del equipo forense y mantienen especial cuidado respecto de la manipulación de los restos de la aeronave, teniendo presente las dificultades de la zona.
El trabajo realizado en el día de ayer tuvo como resultado la extracción de numerosas partes de la aeronave tales como restos de tren de aterrizaje y cola, que están siendo acondicionados en la Base de la Prefectura Naval Argentina, para luego ser trasladadas al aeropuerto de San Fernando para la investigación que tiene por objetivo determinar las causas y factores que ocasionaron el accidente.
Alrededor de las 06.00 de esta mañana un equipo de la JIAAC compuesto por el Director Nacional de Investigaciones, ingenieros aeronáuticos, técnicos mecánicos aeronáuticos y pilotos especializados, se dirigieron al lugar del accidente para continuar con los trabajos. Allí también concurrieron la Dra. Sandra Arroyo Salgado, abogados de los familiares y el equipo de antropología forense.
Se solicitó asistencia de un helicóptero MI 17 de Fuerza Aérea Argentina para el retiro de los restos de mayor peso, y para ello está programado un operativo para constatar las posibilidades de utilizar dicha aeronave.
