Si bien en el último lapso la aerolínea low cost irlandesa ha incrementado su tráfico un 6%, a 18 millones de pasajeros, reporta para el tercer trimestre de su ejercicio una pérdida de 35 millones de euros, en línea con sus previsiones. También registró un descenso de sus ingresos por pasajero del 6%, y sus sólidos ingresos auxiliares no han compensado la caída del 9% en las tarifas, suceso que la empresa señaló como la principal causa de las pérdidas.
El presidente de la aerolínea, Michael O’Leary recordó que para hacer frente a esta situación, la compañía ha lanzado promociones de asientos y tarifas más bajas en septiembre para estimular el tráfico. La compañía registró un ligero descenso de su facturación en este periodo, hasta los 964 millones de euros. En la misma línea de trabajo para apalear la crisis, Rynair abrió cuatro nuevas bases en Roma (Fiumicino), Catania, Lamezia y Palermo. También se propone abrir una base en el Aeropuerto de Bruselas Zaventem, el 28 de febrero; en el de Atenas, el 1 de abril; y en el de Lisboa