Al igual que sucede con el personaje de Tom Hanks en “La Terminal”, un hombre libanés de 56 años está viviendo hace más de un mes en el aeropuerto de Guayaquil. No puede volver a su país porque perdió el sobre en el que guardaba su pasaporte y tarjetas de crédito.
Tal como Víktor Navorski en la película de Spielberg, Nizam Hussein Shalak vive en la sala de embarque internacional del aeropuerto José Joaquín de Olmedo. Ahí improvisó una cama con los asientos. Come con los cupones que de vez en cuando le entrega la aerolínea que está a cargo de él. Y se ducha, según él, cada tres o cuatro días cuando lo llevan a un baño que existe en otra parte de la terminal aérea.
El gobierno ecuatoriano está intentando solucionar la situación para el hombre pueda volver al Líbano.