Desde ya que es cierto. Cuarenta y cinco días sin nuevas autoridades aeronáuticas designadas no es una cuestión menor y complica mucho el día a día de la actividad. Una designación interina destrabaría trámites corrientes en una realidad por demás complicada sobre todo en aviación general.
Ahora!! Viene bien recordar que lo vivido durante los últimos cuatro años fundamentalmente desde ANAC, que al estar conducida por ignorantes, incompetentes, soberbios e irresponsables, fue funcional a una política que desfinancio la actividad, el Organismo y precarizo todo tanto en aviación general como en aviación comercial donde se favorecieron intereses de transnacionales en perjuicio de todo lo nacional.
Cabe como ejemplo de aquel descalabro la locura impulsada por Tomas Insausti y Federico Giannini quienes pretendieron permitir e instalar en el mercado Nacional la Reválida de Licencias Extranjeras, para que pilotos de otros países le quiten el trabajo a los argentinos. De esa locura que no fue posible por la enorme lucha que realizaron la inmensa mayoría de los pilotos argentinos con el apoyo de los sindicatosAeronáuticosUnidos, se cumple exactamente un año.
Entonces…acá no se trata solo de internas y de nombres en función de esas denominadas internas. Se trata de quienes en conjunto aplicaran una política aerocomercial virtuosa que defienda el interés nacional respetando al inversor extranjero, contando con él, pero siempre priorizando el trabajo nacional y a las empresas argentinas.
Días pasados el Ministro de Transporte Mario Meoni hablo en aeroparque de la reciprocidad que debe existir en las relaciones bilaterales con países extranjeros y que en esa materia se debe trabajar para recuperar mercado internacional sobre todo.
Bueno…sin organismos aeronáuticos que vayan en esa dirección la tarea será imposible y para que esa política sea posible deben asumir las personas que estén dispuestas a que eso sea una realidad y no solo un discurso.
Desactivar el Interchange que perjudica a Latam Arg, negociar distintos slots en favor de empresas nacionales, que sea tan importante la autobomba de San Fernando como la del aeropuerto de San Luis, no es para cualquiera y menos para aventureros que se venden al mejor o al peor postor.
Insisto, hace exactamente un año atrás las fuentes laborales de los pilotos argentinos se vieron amenazadas como nunca y por caso la fuerte disminución de la cantidad de pasajeros que transitaron el aeropuerto inter de San Fernando en diciembre 2019 contra diciembre 2018 es otra muestra de la gravedad a la que nos condujeron los iluminados del mejor equipo de los últimos 50 años.
Vuelvo al inicio de la nota. Es de vital importancia resolver el día a día con la mejor solución que se encuentre. Eso debería ser inminente.
Ahora, encontrar los hombres y las mujeres que apliquen una política aerocomercial que proteja lo propio como lo hace cualquier país serio del mundo es imprescindible para poder salir del oscuro lugar en donde nos han dejado quienes vinieron a salvar el país.
