El-expresidente-de-la-CEOE-Ger_54394582781_53389389549_600_396Los ex dueños de la quebrada AirComet, de la recuperada Aerolíneas Argentinas hoy presos en Segovia-Antonio Mata- y en Madrid-Gerardo Díaz Ferrán, deberán declarar como imputados en una nueva causa iniciada por ARSA y siguen sumando. Te contamos las maniobras financieras investigadas en exclusiva.
El magistrado español Fernando Andreu Merelles citó a declarar, para el 24 de setiembre en carácter de imputados a Gerardo Díaz Ferrán y a Antonio Mata Ramayo a raíz de la denuncia por Malversación de Caudales Públicos presentada en España contra AirComet, por las autoridades de Aerolíneas Argentinas, empresa conducida por Mariano Recalde.
En la causa se investiga el destino del dinero que SEPI le entregara a AirComet –unos 500 millones de u$d- a partir del año 2001 cuando ser realizo la compraventa de Aerolíneas entre ambas empresas españolas.
Por tal motivo deberán presentarse a declarar como testigos, los administradores concursales de la querellada (Air Comet) y quien fuera su Director Financiero Antonio Martines LLerandi más los tres representantes de la SEPI.
MECANISMO DE UTILIZACION DEL DINERO Y LA TRAMPA.
Cuando se firmo el contrato de compraventa de ARSA-SEPI AIRCOMET-, SEPI entrego unos 800 millones de U$D de los cuales AirComet debía utilizar 500 millones para plan industrial y poner en marcha la compañía. El dinero en cuestión –HOY INVESTIGADO, LOS 500- estaban en una cuenta bancaria cifrada del BBVA. De allí SEPI giraba los montos necesarios a AirComet, quien debía utilizar el dinero recibido en Aerolíneas y rendirle a SEPI en que se gastaba el dinero utilizado.
Mata y Ferran en el juicio AALA TRAMPA.
Una vez gastado el dinero, lo que AirComet no informaba a SEPI u ocultaba con complicidad de algún funcionario de SEPI, era si el dinero gastado en Aerolíneas provenía de los 500millones de la cuenta bancaria o del giro comercial de ARSA. En este punto también tenía participación PRAICE WATERHOUSE empresa que auditaba el manejo de Aerolíneas en manos de AirComet.
EJEMPLO
En Aerolíneas se certificaban 20 millones de dólares de gastos en combustible con comprobantes. Lo que no decía PRAICE era si esos 20 millones salían del giro comercial de la empresa o del dinero que SEPI giraba desde la cuenta cifrada, con lo cual SEPI liberaba otros 20 millones y así replicaban la operatorio con otros gastos.
Esta práctica hoy investigada solo sería la punta de un iceberg mucho más grande que en su interior escondería maniobras fraudulentas en el alquiler de aeronaves.