El Departamento de Justicia estadounidense alcanzó un acuerdo con ambas aerolíneas y la fusión entre las dos compañías creará la empresa aérea más grande del mundo.
Como parte de las exigencias impuestas, las firmas deberán llevar a cabo una serie de desinversiones y el pacto debe todavía ser aprobado por la Justicia y podría entrar en vigencia a partir de diciembre próximo.
Como parte del acuerdo ambas aerolíneas tendrán que vender derechos de despegue y aterrizaje, así como derechos de embarque en siete aeropuertos a compañías de bajo costo, para poder ofrecer más y mejores opciones a los pasajeros.
En agosto pasado el Departamento de Justicia estadounidense había bloqueado el proceso de fusión tras una demanda civil anti-monopolio que con el nuevo acuerdo queda sin efecto.
El acuerdo entre US Airways y AA permitirá aumentar la presencia de las aerolíneas de bajo costo en los aeropuertos Boston Logan International, Chicago O’Hare International, Dallas Love Field, Los Ángeles International, Miami International, New York LaGuardia International y Ronald Reagan Washington National.
En febrero de este año, AMR, la matriz de American Airlines –en suspensión de pagos desde noviembre de 2011– y US Airways anunciaron un plan para fusionarse la compañía resultante mantendrá el nombre de American Airlines y su sede en Fort Worth (Texas), con una plantilla de 94.000 empleados, una flota de 950 aviones, y operaría unos 6.500 vuelos diarios, con una facturación de u$s39.000 millones.