De oriente al mundo y de ahí a la cima. Emirates busca años tras año rediseñarse y consolidarse como la mayor aerolínea internacional del planeta. Es así como durante el ejercicio 2016-2017 ha hecho inversiones por $3700 millones de dólares para la adquisición de nuevos aviones y equipamiento, la compra de compañías y la modernización de instalaciones con las últimas tecnologías para brindar excelencia a clientes y empleados.
Durante el año fiscal, la aerolínea recibió 35 nuevos aviones, el mayor número de aeronaves en ese período,, incluyendo 19 A380s y 16 Boeing 777-300ERs. A su vez, se retiraron 27 aviones antiguos, llevando a la aerolínea a contar con una flota de 259 aviones a finales de marzo. La renovación de flota, el programa más importante que se ha hecho en un año y que comprende 62 aviones, ha llevado a reducir la edad media de la flota de forma significativa hasta los 63 meses. La media del año pasado fue de 74 meses, mientras que la de la industria se sitúa en 140 meses.
“Estas inversiones fortalecerán aún más nuestra solidez, incluso cuando ampliamos nuestra ventaja competitiva y adaptamos nuestro negocio a un clima empresarial volátil y a las expectativas de los consumidores que cambian con rapidez “ destacó el Jeque Ahmed bin Saeed Al Maktoum, presidente y máximo representante de la compañía quien además agregó que esperan responder rápidamente a los desafíos que se avecinan con la transformación digital.
Asimismo, Emirates inauguró seis nuevos destinos de pasajeros: Fort Lauderdale, Hanói, Newark, Yangon, Yinchuan y Zhengzhou. Y un nuevo destino adicional de carga: Phnom Penh. También sumó servicios y capacidad a nueve ciudades en su red de rutas en África, Asia, Europa, Oriente Medio y América, ofreciendo a los clientes más opciones y conectividad.