El incidente ocurrió a últimas horas del 1 de enero, cuando un pasajero de la aerolínea low cost Ryanair llevaba 30 minutos esperando dentro de un avión en Málaga, en el sur de España, después de aterrizar procedente del aeropuerto londinense de Stansted, donde también había experimentado un retraso.
La tripulación del vuelo y operarios del aeropuerto convencieron al hombre, que no fue identificado, para regresar a la cabina mientras llamaban a la policía, señaló Fernando del Valle Villalobos, uno de los pasajeros del vuelo FR8164. “Me quedé perplejo”, relató por teléfono Del Valle, de 25 años, que regresaba a Málaga con su novia luego de pasar el fin de año en Londres.
La pareja y otros pasajeros esperaban en pie para salir del avión cuando el hombre, “con mucha templanza, pidió permiso a otros pasajeros para pasar y abrió la puerta de la salida de emergencia”, dijo Del Valle. “Se asomó, vio el ala del avión, regresó a por su mochila, y yo entonces saqué el móvil y empecé a grabar cómo se marchaba”, añadió.
Tras regresar a la cabina, Del Valle escuchó al hombre explicar al comandante de vuelo cómo la espera para salir del avión lo había “agobiado”. Los pasajeros permanecieron 15 minutos más en el avión antes de poder abandonarlo, dejando en manos de la tripulación al protagonista del incidente.
La Guardia Civil de Málaga dijo hoy miércoles que se presentó una denuncia por violación de los protocolos de seguridad contra el hombre, al que un portavoz identificó como un ciudadano extranjero. Ryanair confirmó el incidente, diciendo que el asunto quedó en manos de las autoridades españolas.