Durante los días 28 y 29 de agosto se realizó una operación especial de descarga en la TCA del aeropuerto internacional de Ezeiza. Un Jumbo 747-8 abrió su bocota. Control terrestre ATE-ANAC guio a los equipos móviles de Intercago –handling-, grúas y camiones. Se descargaron 26 CAÑOS de 11.80mts de largo. Destino final, YPF-VACA MUERTA.
Y no queda otra que asombrarse. La operación especial del fin de semana genero imágenes únicas, asombrosas, de esas que fijan la vista de propios y extraños. El jumbo 747-8 –la reina de los cielos- en su versión carguera de la aerolínea Silk Way West Airlines abrió su bocota cual cetáceo alado para permitir la descarga de 26 caños de 11.80mts de longitud por 0.76m de diámetro correspondientes a la industria Oil & Gas.
Se trató de dos operaciones, la primera realizada el pasado 24 de agosto y la segunda comenzó durante el mediodía del domingo 28, ayer para finalizar hoy lunes 29 del octavo mes del año.
Una vez arribado el Boeing 747-8 a zona de TCA –Terminal de Cargas Argentina-, el servicio auxiliar de control terrestre con sus vehículos, guio a los camiones para que circulen por las áreas permitidas mientras fueron cerradas las posiciones lindantes a la utilizada por la aeronave y además se delimitaron las sendas vehiculares para que los equipos móviles pudieran ingresar y salir de todo el espacio afectado a la operación.
Para descargar el avión carguero más moderno del mundo fabricado por Boeing en la línea 747, Intercargo –servicio de handling argentino- realizo el ingreso de cinco grúas y 10 camiones con semirremolques, además de utilizar todos sus equipos necesarios.
El destino de los grandes tubos es la planta Canning de la empresa AESA que adquirió el material especial para fabricar un equipo turbo expander de gas en sus talleres de la provincia de Buenos Aires. Al finalizar esta primera etapa el equipo fabricado será montado en el yacimiento “VACA MUERTA “que YPF posee en la provincia de Neuquén.
Una vez más, tal como como sucedió con el transporte de vacunas, el aeropuerto de Ezeiza con toda su capacidad técnica y humana resulta vital en la cadena del transporte y el eslabón de los servicios auxiliares de control terrestre –ATE ANAC, cumplió con su silenciosa e imprescindible función.