Al ritmo del hit “Despacito”, Javier Otero, un tripulante de la aerolínea irlandesa, se convirtió en furor a 26 mil pies de altura y su interpretación se viralizó en las redes hasta hacerlo famoso también en tierra firme con más de un millón de reproducciones. Es que el improvisado cantante interpretó el pegadizo ritmo para vender los cupones que ofrece la aerolínea low cost. Una condición que les impone la compañía pero a la que le agregó un alegre sello personal.
Los pasajeros del vuelo desde Sevilla a Gran Canaria vivieron una fiesta en el aire gracias a la ocurrencia del azafato y su carisma para la interpretación. El vídeo de la versión llamada “2 euritos” fue compartido, incluso, en la propia cuenta en Facebook de Rayanair, desde donde se animó a los seguidores a que enviasen sus canciones a bordo.
Diego Dominelli habló sobre el improvisado cantante en CN23:
Otero explicó: “En Ryanair dan libertad para darle el toque que tu quieras, en otras compañías es más cerrado” y agregó: “Vender, tengo que vender. Pues prefiero hacerlo de forma que el cliente se divierta y se ría. Yo no quería hacerme viral, me conformo con que los viajeros disfruten y el vuelo se les haga más ameno”.
De esta manera, el ahora famoso empleado revela a través de su declaración la política de la aerolínea de bajo costo más grande del mundo, que había anticipado Aviación en Argentina y que detalla en un documento APTA, que obliga a sus tripulantes a vender productos a bordo y alcanzar un objetivo diario para “impulsar las ventas” de la compañía. Claro está que Otero lo consiguió de una manera muy efectiva y pegadiza que todos celebraron en el aire.