Corría el mes de abril 2020, llevábamos un mes de confinamiento y al mismo tiempo la industria aérea buscaba soluciones, alternativas y nuevas posibilidades para resolver problemas de una realidad inédita.

Fue en ese contexto que los vuelos cargueros puros y las aeronaves de pasajeros adaptadas para transportar carga cobraron una importancia y un valor impensado en la etapa pre pandémica, que podríamos convenir duro unos 60 o 70 años.

Recordemos que un avión puede despegar o esta ok para hacerlo cuando están las tres firmas –Comandante, Despachante y Técnico de Mantenimiento-, si falta una de ellas el avión no se va. Se queda en tierra.

LA PANDEMIA como en todos los eslabones de la cadena aerocomercial, impacto de forma negativa en el rubro de los despachantes por la menor cantidad de vuelos existentes, pero al mismo tiempo, les dio luz, los hizo visibles ante los medios masivos de comunicación y el público en general, dado que las y los despachantes son esenciales para que un vuelo sanitario con 800 mil vacunas este en el aire, transportando salud.

Para conocer como es el despacho de un Airbus 330-200 estibado con vacunas, re editamos la nota que le realizamos a Javier Biondani, despachante operativo en Aerolíneas Argentinas, del primer vuelo a Moscú que arribo a Ezeiza con 300 mil vacunas SPUTNIK V el 24 de diciembre 2020. MIRA EL VIDEO

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