cieloEl permiso de código compartido internacional LAN-IBERIA otorgado por ANAC permite que desde Córdoba y Mendoza turistas argentinos lleguen a Madrid vía Santiago.

Algunas medidas adoptadas por el gobierno nacional en materia aerocomercial, permiten de hecho abrir cielos sin que exista una ley de -cielos abiertos- que regule la actividad con esas libertades. Esto invierte el sentido en el cual se venia trabajando en la Argentina. El permiso de código compartido internacional otorgado por la ANAC -Administración Nacional de Aviación Civil- a las empresas LAN AIRLINES E IBERIA, permite que pasajeros argentinos desde Mendoza y Córdoba, lleguen a Madrid vía Santiago de Chile.

Esta nueva realidad no privilegia a las empresas nacionales, ni privadas, ni estatales que operan en el país, sino que sienta un precedente y deja vía libre a nuevos acuerdos de código compartido, mas la llegada de otras compañías -CASO AVIANCA- para cubrir rutas nuevas o para continuar con el camino iniciado por este permiso internacional.que permite vender en forma conjunta, y como extensión del tramo Madrid-Santiago-Madrid, las rutas de Santiago de Chile a Mendoza y Córdoba.

Esto no solo es posible por la existencia del acuerdo sino por que LAN EXPRESS, filial de LAN AIRLINES, vuela desde Santiago a Córdoba y Mendoza. Dato al margen pero no menor LAN EXPRESS, vuela a Malvinas.

Otra decisión tomada hace un mes atrás que, sin este tipo de acuerdo, también perjudica a las empresas nacionales fue, que LAN Perú vuele desde Lima a Salta y Mendoza, sacando pasajeros argentinos hacia todo el continente desde la capital peruana.

Desde este medio no hay nada contra las empresas de países vecinos o de la región. Solo señalamos que la balanza se inclina en favor de compañías extranjeras. Ni siquiera el grupo LAN sumo destinos en el continente para su filial ARGENTINA. Si a esto le sumamos la cancelación de la ruta Buenos Aires – Brasilia, que volaba Aerolíneas Argentinas, se ve con claridad que al menos durante estos tres meses de Gobierno las libertades instaladas y permitidas, benefician a las compañías extranjeras, abren cielos en determinadas provincias de manera un tanto express y sientan un precedente que de profundizarse afectara negativamente en el mercado interno y en las empresas nacionales.