jLos trabajadores de Avianca Argentina cobraron la primera cuota de su sueldo el lunes 18 de marzo. La crisis de la empresa vinculada a la familia del Presidente Macri puede ser un caso testigo. Otras empresas han tenido beneficios impositivos que hoy le son negados a Avianca.

Medir con doble vara en algunos rincones de la actividad aerocomercial continua siendo una suerte de norma para el Gobierno Nacional y en esa realidad se enmarca la crisis que vive Avianca Argentina.

La mala política tarifaria, los bajos niveles de ocupación aun en temporada alta, los altos costos en dólares y la imposibilidad para Avianca Argentina, de compensar el pago de IVA, con otros impuestos mientras a LATAM se le ha permitido durante el año 2017, muestra una vez más que los hilos que sostienen las operaciones de algunos son poderosos y de otros no.

Señalo este punto porque si bien desde el Ministerio de producción y Trabajo no se homologo el pedido preventivo de crisis solicitado por Avianca, manteniendo así los convenios colectivos de trabajo firmados, no escapa a gran parte de le industria que la filial Argentina de Avianca enfrenta momentos decisivos en términos de supervivencia, y en esa realidad que se le permita compensar el pago de IVA con otros impuestos, al menos descomprimiría en algo la difícil situación que vive la empresa y sus trabajadores.

Para comprender bien de que se trata el tema. Las empresas aéreas venden sus pasajes con un 10.5% de IVA pero pagan el 21% cuando compran insumos o pagan combustible. Esto genera un desfasaje por determinados tecnicismos del oren del 9% entre las compras y las ventas. A  eso debe sumársele el IVA retenido por aquellas empresas que funcionan como agentes de retención, por caso los Bancos

Cuestión que por todas estas variables y algunas más Avianca tendría inmovilizados unos 30 millones de pesos. No los puede utilizar para ninguna operación económica o financiera. Andes y Norwegian viven la misma realidad.

Siguiendo con el modus operandi conocido, el Ministerio de Transporte, del mismo modo que le dio la espalada a LASA cuando tuvo que dejar de volar, a Andes cuando tuvo devolver cuatro aeronaves y comenzar a pagar los sueldos en cuotas, al menos por ahora sucede lo mismo con Avianca Argentina.

Flybondi no está incluida en la misma realidad de Avianca, Andes y Norwegian, porque recibe, beneficios impositivos en Córdoba, en la Provincia de Buenos Aires, ha conseguido repros para pago de salarios, que le construyan un aeropuerto y ayudas económicas de cuatro millones de pesos en Rosario. Aun con todo eso pierde unos tres millones de dólares mensuales.

Si el Ministro Dietrich y su gente no cambian el rumbo, respecto de cómo solucionar, o cómo enfrentar esta crisis que ahora se manifiesta en Avianca, el efecto domino que generaría el despido de trabajadores en la filial Argentina del Holding podría escalar hacia un lugar no deseado por nadie.

Lo cierto es que la locura reina en la denominada revolución de los aviones. Un horizonte de posibles despidos en Avianca, un posible efecto domino negativo que se expanda hacia otras empresas argentinas, con trabajadores argentinos que operan en el país, son temas existentes de los que casi nadie habla en público. Por ahora

Ha… por el beneficio que en 2017 tuvo LATAM, adjuntamos el documento.

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